El caso comenzó con la denuncia del secuestro de Alejandro Ripley, de 9 años, y pronto pasó a ser una investigación por asesinato tras el hallazgo del cadáver del niño en un lago. La principal sospechosa es Patricia Ripley, madre del menor, quien admitió la muerte del chico y dijo que "él iba a estar en un mejor lugar".

Patricia Ripley enfrenta cargos por la muerte de su hijo Alejandro luego que, según las autoridades de Miami-Dade, se lograra obtener evidencia suficiente para determinar su responsabilidad en lo ocurrido. Un video demostraría que la mujer empujó en dos ocasiones al pequeño a un canal de agua, pero la primera vez este fue auxiliado por vecinos que escucharon sus gritos. El padre del menor rechazó las acusaciones contra la madre y la sospechosa permanece en la cárcel sin derecho a fianza.

En las últimas horas, la investigación ha dado un giro de 180 grados: Patricia Ripley pasó de denunciar un presunto secuestro a ser arrestada y acusada de asesinato en primer grado e intento de asesinato premeditado.

Alejandro Ripley de 9 años de edad padecía autismo severo y debido a su condición no podía comunicarse verbalmente. Según la versión de la madre, el menor fue secuestrado por dos hombres en el estacionamiento de un centro comercial. El cuerpo del menor fue encontrado este viernes en horas de la mañana a 4 millas del lugar donde presuntamente ocurrió el incidente.

Versiones extraoficiales indican que el registro de una cámara de seguridad del estacionamiento del Home Depot donde habría ocurrido el presunto secuestro, desmentiría parte de la versión ofrecida por la madre.

Una persona que caminaba por campos de golf en el área de The Hammocks avisó a las autoridades que había visto el cuerpo del menor, cerca de las 7:30 am del viernes. La madre del niño había denunciado su secuestro el jueves en la noche.