Un grupo de personas se dio cita este domingo en un parque del norte de la ciudad para obsequiar abrigos, alimentos y bebidas calientes a los más necesitados de la zona.

Algunos de los latinos que se han visto obligados a vivir en las calles de La Villita y Pilsen aseguran que las altas rentas en habitaciones y casas los ha llevado a estar en la actual situación. Además, dicen que se han tenido que enfrentar a otros desamparados para poder habitar ciertas calles de la ciudad.

Con deslizadores de nieve, música, comida y regalos, decenas de menores celebraron por adelantado la Navidad. Padres de los niños beneficiados agradecieron por la iniciativa de las autoridades de la ciudad.

Pedro Oropeza Chávez, de 40 años, padece diabetes y esclerosis múltiple, lo que le ha dificultado encontrar un empleo. Es el principal proveedor de su casa por lo que el dinero que tiene es destinado a los gastos de la casa, dejándolo con muy poco para hacerles regalo a sus familias.

El Centro de Bienestar de Pilsen lideró el evento en el que un numeroso grupo de niños que vive en esa zona de la ciudad recibió algunos regalos navideños por adelantado.

Muchos estudiantes de escuelas públicas se han quejado de no tener acceso fácil a sitios para practicar deporte.