Ciudades como San José, en California, han aprobado ordenanzas locales para que los restaurantes puedan colocar mesas en parques, estacionamientos, plazas y banquetas, con el fin de evitar que tengan que operar en capacidad limitada debido a las normas de distanciamiento social por coronavirus.

Pese a que las autoridades prohibieron al productor de vehículos eléctricos reanudar sus operaciones debido a la pandemia de coronavirus, su CEO, Elon Musk, decidió abrir su planta ensambladora en Fremont, no sin antes demandar al condado de Alameda y de paso recibir el apoyo del presidente Donald Trump.

La ambiciosa propuesta legislativa plantea pagos de 2,000 dólares durante un periodo de seis meses para los ciudadanos afectados por el coronavirus, monto que se duplicaría a $4,000 para las parejas casadas con la posibilidad de recibir $500 adicionales hasta por tres dependientes menores de edad.

El primer contagio de origen desconocido reportado en Silicon Valley en febrero le dio señales a los funcionarios de salud de que el virus se encontraba circulando en la comunidad mucho antes de lo que pensaban.

Este fondo millonario está disposición de los dueños de pequeños negocios que operan en regiones donde haya oficinas de la red social. La mitad irá para los comerciantes hispanos, mujeres y otros miembros de las minorías.

Los fondos se repartirán a través de la iniciativa Silicon Valley Strong, un fondo millonario encabezado por la ciudad de San José que se encarga de hacer llegar recursos a las familias necesitadas sin importar su estatus migratorio.