El estrés y la ansiedad son patrones mentales que pueden realmente hacer estragos en la mente y los pensamientos de una persona. Casi siempre ambos síntomas van de la mano y pueden llegar a ser tan fuertes que el o la afectada, que pueden llegar a perder el control de si mismos, reflejándose incluso como un problema de salud grave.

Antes ir a un spa quería decir que tenías que tomar un viaje largo, fuera de la ciudad, con gastos enormes que la mayoría no podía pagar para así poder relajarse en los que se llaman Resorts Spa. Todavía existen pero también se han proliferado los spas en todas las ciudades donde nos podemos volver miembros y no ir más allá de 5-10 minutos para llegar a él.

No es ninguna novedad el hecho de que el masaje es una práctica sumamente relajante y que alivia la tensión. Basta con ir a una sesión de masaje para comprobarlo y sentir la liviandad que experimentamos en nuestro cuerpo al salir, además de la relajación mental que nos hace ver los pequeños problemas cotidianos como cosas triviales que no requieren mucha atención.

Los masajes relajantes son un tratamiento terapéutico con métodos físicos y funcionales para que los músculos se relajen al máximo. El arte de los masajes efectivos es que se haga la presión adecuada en los músculos, y puede variar dependiendo de lo que la persona tratada quiera. Sin embargo, siempre debe tener una estructura y/o tensión y vibración mientras se manipula para lograr mejores resultados.

A pesar de que la filosofía oriental y todo lo que ella implica han ganado muchísimo terreno con el correr de las décadas, lo cierto es que la gran mayoría de círculos de personas la continúan viendo con cierta reticencia, afirmándose a sus propios valores occidentales sin comprender que la apertura mental es la mejor herramienta para aprender y encontrar la felicidad.

La aromaterapia tiene múltiples aplicaciones, y esto se lo debe a la gran variedad de aceites esenciales con los que trabaja. Afortunadamente todos ellos están al alcance de nuestra mano, y aplicándolos sea en forma de fragancias o directamente sobre la piel, podemos asegurarnos que sentiremos sus efectos.