El presidente Trump viajó a Long Island para pronunciar un discurso contra la Mara Salvatrucha frente a cientos de agentes de las fuerzas del orden. Allí dijo que "arrestará y deportará" a los pandilleros, a los que calificó de "animales". Su guerra contra la MS-13 genera temor e incertidumbre entre la comunidad hispana.

Tres presuntos pandilleros de la llamada Mara Salvatrucha están tras las rejas, acusados de ser los responsables de la matanza de cuatro jóvenes en un parque de Long Island. Los investigadores todavía no informan si están buscando a más sospechosos por este crimen y cuáles son los elementos que vinculan a los arrestados con esa masacre.

Los miembros de la pandilla MS-13 se aprovechan de niños y jóvenes que buscan pertenecer en un lugar en el que carecen de una familia o un sistema de apoyo. Una audiencia en Long Island, Nueva York, expuso algunos de los métodos de la Mara Salvatrucha con los más vulnerables y los esfuerzos para combatir su creciente alcance.

El gobierno de El Salvador negoció en 2012 con las pandillas una reducción de homicidios a cambio de beneficios carcelarios. Cinco años después, la justicia salvadoreña ordenó procesar a una veintena de personas involucradas en la negociación, pero no han esclarecido el papel que jugaron los políticos de primera línea que dirigían la seguridad pública.

El historial criminal de Irwin Hugo 'Droopy' García, Jesse 'Grinch' Pérez y Jorge Alberto Ramos los vincula con comercio ilegal de armas, tráfico de narcóticos y extorsiones. El Buró Federal de Investigaciones (FBI) usará las redes sociales para reforzar la búsqueda de estos hombres.

El asesinato de Christian Villagrán Morales en junio de 2016 es uno de los cinco que han sido atribuidos a esta mara en el condado de Montgomery, Maryland, en los últimos 14 meses.