En la noche del lunes, tras el funeral de Diana Carolina, la mujer ecuatoriana embarazada que fue asesinada por su pareja venezolana en la ciudad andina de Ibarra, se produjo una nueva manifestación contra los ciudadanos de ese país. La ola xenófoba desatada tras el feminicidio ha hecho que algunos migrantes huyan y otros se escondan.

Los agentes no lograron ponerle freno a la pareja de la víctima, un venezolano de 22 años de edad, quien amenazó reiteradamente con matarla. Tras 90 minutos de horror ocurrió la tragedia. Advertencia: las imágenes son perturbadoras y pueden herir la sensibilidad de algunas personas.

La muerte de una mujer embarazada a manos de un inmigrante venezolano en Ibarra, al norte del país andino, generó actos de rechazo a la comunidad venezolana en esa ciudad. El vicepresidente dijo que se exigirá a los nacionales de ese país la presentación de sus antecedentes penales como una forma de controlar la migración que llega.

La víctima de 31 años y madre de dos niños pequeños quedó tendida sobre el pavimento y ni el responsable del accidente, ni las personas que pasaban por el lugar, movieron un dedo para auxiliarla.

Cuatro sujetos asaltaron el vehículo y apuñalaron al conductor además de robar las pertenencias de los pasajeros. Milagrosamente, el chofer logró sobrevivir.

Familiares de ecuatorianos que viven actualmente en EEUU, los que vivieron en ese país y regresaron, y los que están planeando emigrar, visitan cada comienzo de año el santuario de la Virgen de la Nube, considerada por muchos la protectora de los migrantes que dejan Ecuador.