Las peligrosas temperaturas bajo cero no dan tregua en el medio oeste y noreste del país. Más de una decena de personas han perdido la vida, entre ellas un estudiante universitario que fue encontrado en el campus cuando la sensación térmica alcanzó -51 grados Fahrenheit.

Un día después de la ola de frío que azotó la ciudad, trabajadores y miembros de la comunidad salieron de sus casas para realizar sus actividades cotidianas. Por su parte, el alcalde Rahm Emanuel, en compañía de otros funcionarios, entregó un balance de las ayudas y recursos utilizados durante el pasado miércoles.

Con camiones removedores ubicados en puntos estratégicos de la ciudad, las autoridades se alistan para intentar mitigar los efectos de las difíciles condiciones del tiempo en calles y vías. Por el momento se registra flujo vehicular en completa normalidad.

El frío sigue afectando al 75% del territorio estadounidense, lo que significa que 216 millones de personas están viviendo con temperaturas por debajo del punto de congelación (32ºF). Tras las mínimas de este miércoles, los termómetros siguieron marcando temperaturas gélidas en unas 40 ciudades de ocho estados en la franja del Medio Oeste.

El vórtice polar ha afectado a los equipos de bomberos de New Jersey, Wisconsin o Indiana, donde el frío extremo ha complicado las tareas de extinción de los incendios.

Las temperaturas seguirán peligrosamente bajas en la zona de la Gran Manzana, alcanzando sensaciones térmicas en los -9 graddos Fahrenheit, con vientos de 20 millas por hora. La situación se extenderá en la madrugada del jueves y hasta el sábado se empezará a ver un aumento en el clima.