Familiares de víctimas de crímenes violentos que fueron cometidos por sospechosos que quedaron en libertad bajo fianza en el condado de Harris les exigen a las autoridades un cambio. Por esta razón, Crime Stoppers está apoyando el proyecto de ley SB21 con la que se pretende analizar el historial criminal de los arrestados antes de que se les otorgue una fianza.

Una juez del condado, tras la audiencia, decidió negarle el derecho a fianza a Yondeivis Wongden Hernández, quien figura como el presunto homicida de la joven la madrugada del 24 de mayo de 2019. Por otro lado, las investigaciones señalan que Randy Rodríguez fue el hombre que condujo el vehículo en el que huyeron los sospechosos, mientras que Carlos Paterson-Torres habría sido el encargado de deshacerse del automóvil.

Alex García, de 16 años, se declaró inocente al presentarse de manera virtual ante una corte de fianzas. Las autoridades informaron que existe evidencia suficiente para determinar que el sospechoso consumió alcohol y marihuana antes del mortal choque registrado en la madrugada del 1 de enero. Los familiares de una de las víctimas, que estuvieron presentes en la audiencia, exigieron justicia.

Aliex Santiesteban permanece en la cárcel TGK, negó las acusaciones que recaen en su contra y una jueza de fianzas reiteró que él “es un peligro para la sociedad”. Gracias a pruebas de ADN, la policía del condado logró identificarlo, llegar a su apartamento y proceder con la captura, momento en el que además fue confiscada un arma y el vehículo en el que se transportaba. El hombre de 43 años cuenta con un récord criminal y enfrentará varios cargos criminales.

La juez Yolanda Huff, quien dirige la Corte de Salud Mental del condado Bexar, explicó por qué es importante que no todas las personas arrestadas reciban el mismo trato. Un abogado explicó a Myrna Salas lo que implicaría la aprobación de la medida SB21.

Ecoire Collier y Dorian Taylor, de 21 y 24 años de edad, respectivamente, son señalados de haber cometido el crimen que tiene conmocionada a toda la ciudad del sur de Florida. Según las autoridades, ambos sujetos, provenientes de Carolina del Norte, confesaron haber conocido a la víctima en un restaurante, luego darle “una píldora verde” que podría ser Percocet y llevarla al hotel donde al parecer tuvieron relaciones sexuales y posteriormente fue hallada sin vida. Más noticias aquí.