Hay un principio legal que dice que nadie puede ser juez de su propia causa. Pero la Constitución no dice nada sobre la capacidad del presidente de ejercer ese poder de perdón para beneficiarse a sí mismo.

Los jueces conservadores de la Corte Suprema parecieron renuentes a fallar de inmediato para bloquear el plan de la administración Trump. La nueva jueza, Coney Barrett, dijo al abogado del gobierno que todos los precedentes históricos contradicen la posición del presidente. La Unión Americana de Libertades Civiles (ACLU) precisó que es muy temprano para saber qué decidirá el máximo tribunal de justicia. Más información aquí.

En la audiencia de argumentos, varios jueces recordaron al gobierno que el Censo siempre ha incluido a las personas que habitan en EEUU, independientemente de su estatus legal, y pusieron en duda que la exclusión que pretende hacer Trump de los indocumentados pueda concretarse.

Según expertos, un posible aval del Tribunal Supremo a las intenciones de la actual administración generaría un fuerte impacto en la distribución de fondos federales y de los escaños en el Congreso. Tres cortes inferiores han dictaminado previamente que la medida va en contra de la Constitución. Para el analista político Luis Alvarado todo esto tan solo es un esfuerzo del presidente por demostrarle a sus simpatizantes su fuerte postura frente a la inmigrantes. Más información aquí.

La campaña de Donald Trump exigió dos recuentos en dos condados en Wisconsin. En el primero, realizado en el condado de Milwaukee, Trump obtuvo 125 nuevos votos pero Joe Biden ganó 257, de un total de casi 460,000 emitidos en el condado, por lo que el presidente electo aumentó su ventaja. Queda aún un segundo recuento cuyo resultado se conocerá este domingo.

La Corte Suprema rechazó la petición de la cadena Walmart de vender licor en sus establecimientos del estado de Texas.