Si bien es posible asociar el trabajo con el estrés, puede que el ambiente de la oficina no sea el mayor desencadenante de esta enfermedad en tu cuerpo. Puede que tu propia casa sea una de las fuentes de estrés sin que tu lo sepas.

El estrés es la nueva epidemia de la era moderna. De hecho, ya se ha instalado en la vida de una gran mayoría de personas y se ha convertido en el principal causante de dolores de cabeza, problemas digestivos, tensión muscular, cambios en el apetito, bruxismo y muchas otras problemáticas más.

Un horario de trabajo de locos, una vida familiar ocupada y un régimen de ejercicios riguroso pueden incrementar el estrés, incluso si el agente estresante es positivo. "El estrés es una respuesta fisiológica y emocional a una amenaza", dice John McGrail, Ph.D., un hipnoterapeuta clínico de Los Angeles. “Está biológicamente destinado a ser una condición de corto plazo para sacarnos de una situación amenazante o peligrosa”.

El estrés puede tener vías de escape imprevistas y para nada deseables. Así, para nombrar unas pocas, puede llevar a comer en exceso, a gastar más de la cuenta o beber en demasía. Todas sentimos estrés en algún que otro momento, pero ninguna de nosotras está condenada a experimentar estas terribles consecuencias. Es todo una cuestión de elección. Por tanto, elige estar bien y aprende las 5 mejores estrategias para recuperarte del estrés.

A todas nos viene bien liberarnos, ensuciarnos un poco y conectarnos con el arte para liberar el estrés y los nervios de la semana. Por eso, dedicarnos un tiempo de relax y distensión para nosotras es fundamental.

Sabemos que alimentarse sin muchos miramientos puede tener efectos nefastos en términos de salud física, y lo mismo ocurre con el estado de salud mental y emocional. Prestar atención a lo que se come nos permite, por ejemplo, dormir mejor.