Luis Ángel no recuerda cuándo fue la última vez que comió algo más que tortillas con sal. Su madre, Susana Martínez, se quedó sin trabajo durante la pandemia del coronavirus. Lo único que les quedaba para buscar un poco de ayuda eran los juguetes del niño, quien no dudó ofrecerlos para intercambiarlos por algo de comida.

Catalina García, de 62 años, lucha por sacar adelante a sus hijos en Guatemala. Uno de ellos quedó inválido por una meningitis cuando tenía solo dos años, el otro no ha podido conseguir trabajo por la cuarentena.

Más de 40 millones de personas visitan Las Vegas cada año. Sin embargo, la pandemia del covid-19 ha significado el freno a la actividad turística y con ello cientos de personas, buena parte de ellas hispanas, se han quedado sin su fuente de empleo. Es por eso que las largas filas en la ciudad son esta vez en los bancos de alimentos.

La crisis que se vive en Venezuela se ha incrementado con la pandemia, pues con la cuarentena ordenada por el régimen de Nicolás Maduro muchos comedores sociales han cerrado sus puertas por la falta de donaciones y los habitantes aseguran que tienen que recurrir a esto para no morirse de hambre.

Casi en pleno centro de Los Ángeles, existía un terreno baldío que se convirtió en una fuente de alimentos, donde hoy por hoy se siembran frutas y verduras que van directo a los comedores de nuestra comunidad. Quienes son beneficiados solo deben acudir sin responder ningún cuestionamiento.

La necesidad está obligando a millones de personas en EEUU a recurrir a los bancos de alimentos para poder llevar un plato a su mesa, y de ellos alrededor de la mitad se está enfrentando a este panorama por vez primera debido a la pandemia del coronavirus. Largas filas y madrugar puede resultar inútil porque la comida no alcanza. Te decimos cómo buscar ayuda y cómo puedes ayudar.