Bill de Blasio

Se trata de una iniciativa que anunció el alcalde Bill de Blasio que buscará garantizar durante los próximos 10 años que todos los neoyorquinos cuenten con un plato de comida en sus hogares. La idea con este proyecto es que tanto en escuelas como en refrigeradores de la ciudad, y hasta en organizaciones sin fines de lucro, haya suficientes alimentos de calidad para que sean entregados a quienes más lo necesitan.

El ex presidente Donald Trump pretendía recortarle fondos federales a lugares como la ciudad de Nueva York al declararlos "anarquistas" después de los disturbios ocurridos en las protestas por la muerte de George Floyd.

Miles de alumnos de los grados sexto, séptimo y octavo en la Gran Manzana regresaron este jueves a las escuelas siguiendo los protocolos de seguridad e higiene establecidos para mitigar la propagación del coronavirus. “Es algo reconfortante porque los niños extrañan interactuar con otros niños”, afirma un padre de familia.

Pese a que el alcalde Bill de Blasio aseguró que se ha hecho un trabajo responsable para garantizar la seguridad de los menores y el personal que trabaja en las escuelas públicas, varios educadores creen que es un riesgo que no todos estén vacunados y que, además, algunos planteles hayan sido usados como centros de pruebas e inmunización en medio de esta pandemia.

Las autoridades de salud han dispuesto varios centros móviles para que la comunidad continúe haciéndose exámenes de detección y así se pueda avanzar con la reapertura económica de manera segura. Por otro lado, el gobernador Andrew Cuomo anticipó que estará habilitando algunos encuentros deportivos, bodas y otro tipo de eventos utilizando un sistema de pruebas rápidas que en menos de 30 minutos arrojan resultados. Más información aquí.

Según cifras oficiales, solo el 16% de los hispanos en la Gran Manzana ha logrado inmunizarse, pese a que en distritos como Queens, donde hay una gran población latina, se han registrado más de 7,000 muertos a causa coronavirus. Ante este panorama, activistas dicen que los encargados de agendar citas muchas veces no manejan el español y esto dificulta que los elegibles puedan concretar fechas para recibir una dosis de la vacuna. Más información aquí.