La medida permitirá a miles de inmigrantes participar en los sorteos para quedarse con uno de los apartamentos de alta calidad que serán subsidiados por el gobierno local y certificados por el Departamento de Medio Ambiente. Opositores de la decisión argumentan que esto recorta las posibilidades de residentes de la ciudad que viven en la pobreza.

Bajo las nuevas reglas, los solicitantes ya no deberán proveer sus números de seguro social o un número de Tax ID (ITIN), ni será necesario entregar o someterse a un reporte de crédito.

Los neoyorquinos elegibles podrán recoger su certificado de regalo en una biblioteca pública de la ciudad.

El reporte de la organización The Legal Aid Society indica que, durante esta estación, de 2018 a 2019, hubo más de 3,500 cortes de estos servicios en los inmuebles de la Autoridad de la Vivienda de la Ciudad de Nueva York. Según el documento, 339,000 inquilinos resultaron afectados. Por su parte, la entidad dijo a través de un comunicado que “estamos trabajando durante este verano para construir las mejoras para el invierno que viene”.

Los miembros del Concilio estarán presentando un nuevo paquete legislativo para enfrentar este desafío, pues señalan que ya es hora de hacer algo al respecto. Los datos presentados indican que cerca de 40,000 latinos fueron desplazados de comunidades como Pilsen en los últimos 10 años, mientras unos 200,000 afroestadounidenses debieron mudarse de la ciudad.

El reciente reporte federal indica que la ciudad no ha cumplido su promesa de resolver varios inconvenientes que aquejan a los residentes de las casas de NYCHA. La asambleísta Carmen De La Rosa aseguró que esta problemática es un asunto histórico que lleva años sin solución. Los habitantes de estas unidades también resaltaron la falta de seguridad en los edificios.