El programa “Compadre a compadre” ofrece a aquellos hombres encarcelados una oportunidad para convertirse en mejores padres al estar en libertad, además de que el cambio es integral porque se refleja en la búsqueda de tener una familia.

Se trata de Alfredo Castro, un recluso de 28 años acusado por delitos como robo en una propiedad, dinero y al menos otros dos crímenes.

Padres y madres de presos recluidos en cárceles de California han encontrado a través de la oración un sentido de vivir. Ellos cuentan que el apoyo emocional y espiritual ha sido fundamental para soportar la distancia que los separa.

Jeannette es una joven de 21 años que estuvo en prisión y ahora, tras meses de sobriedad, pide una segunda oportunidad para reconstruir su vida.

Lando, estuvo preso 18 años por un crimen que no quiere recordar, al salir de la cárcel decidió darle otro rumbo a su vida y no permitió que su pasado marcara su presente ni su futuro.

La junta estatal de libertad condicional calcula que entre 3,000 y 4,000 reos podrían resultar beneficiados de este proceso si pasan un riguroso escrutinio tras un fallo judicial emitido en septiembre. La medida fue aprobada en 2016 por el 64% de los electores y enmendó la Constitución estatal para incrementar las opciones y beneficios por buen comportamiento para los presos no violentos.