En Miami, Luis Almagro, secretario general de la Organización de los Estados Americanos (OEA), hizo contundentes declaraciones sobre la crisis que enfrenta Venezuela tras las elecciones en ese país. El funcionario se pronunció sobre las acciones del régimen de Nicolás Maduro, criticó la violencia contra el pueblo venezolano y reiteró su petición de ordenar su detención. El comisionado Joe Carollo y el alcalde Francis Suárez agradecieron a Almagro su lucha por la democracia.

El Consejo Permanente de la Organización de Estados Americanos (OEA) llevó a cabo una sesión de emergencia, en la que se buscaba aprobar una resolución para exigir la publicación de los resultados detallados de las elecciones presidenciales en Venezuela. Colombia, Brasil, Honduras y Bolivia fueron algunos de los 11 países que se abstuvieron de votar.

Tras el informe del Centro Carter que refiere no poder corroborar los resultados de la votación emitidos por el CNE en las elecciones en Venezuela, los presidentes de EEUU y Brasil también pidieron que se divulguen inmediatamente las actas. También se pronunció el presidente de Colombia y la OEA.

Una centenaria disputa por el territorio Esequibo calienta las relaciones entre Venezuela y Guyana y amenaza con desatar una crisis regional con posibles desenlaces militares. Un polémico referendo y varias medidas adoptadas después por Nicolás Maduro agudizan la tensión.

Este jueves se llevó acabo una sesión de la Organización de Estados Americanos (OEA), en la que se abordaron diversos asuntos con respecto a la situación en Cuba, Nicaragua y Venezuela. Uno de los temas que se discutieron fue si se revocaba la presencia del representante de Juan Guaidó; sin embargo, este punto no alcanzó los votos necesarios. Asimismo, el secretario de Estado de EEUU, Antony Blinken, pidió unirse para buscar una opción que garantice las elecciones libres en Venezuela.

El presidente guatemalteco, Alejandro Giammattei, acudió a la OEA, en Washington, para protestar por el informe, algo inusual en un jefe de Estado. La CIDH denuncia las injerencias contra la independencia judicial y otras violaciones de derechos.