Christopher Álvarez, de 23 años, desafió todos los pronósticos de vida al padecer enanismo tanatafórico, una enfermedad que le afecta el desarrollo del esqueleto y en la cual crecen los órganos, pero no la caja torácica. Su historia de vida ha llegado a muchos en todo el mundo y se ha convertido en redes sociales en un ejemplo de superación.