Los vecinos de un edifico de apartamentos en Arlington nunca pensaron que dos de sus vecinas, madre e hija, tuvieran en su apartamento un laboratorio de metanfetaminas que quedó al descubierto tras su explosión. En el lugar la policía arrestó a esas dos personas, rescató a un menor de edad y decomisó 20 libras de la droga, dinero en efectivo y un auto.

Los padres de Gabriel Cisneros de Pilsen, una de las víctimas mortales de la heroína, aseguraron que una recaída luego de que su hijo reconociera que era adicto fue la que acabó con su vida. Aprovecharon para pedir a los padres de familia que fomenten el diálogo con sus hijos para prevenir que caigan en el oscuro mundo de las drogas.

En 2015, el número de muertes en el condado de Cook por heroína, fentanilo y sus derivados fue de 29, mientras que en 2016 ese número aumentó a 147. Pese a este dramático incremento, las autoridades luchan ahora contra otro medicamento, el carfentanil o tranquilizante de elefantes, una droga 100 veces más potente que el fentanilo y 10,000 veces más poderosa que la morfina.

Eddy Borrayo de Rincón Family Services aseguró que una de las principales problemáticas que enfrenta Chicago para la atención de pacientes adictos a los opioides es la falta de camas en los centros de rehabilitación. Borrayo indicó que, pese a que el estado aporta recursos para la atención de adictos, las agencias tampoco cuentan con el personal necesario debido al incremento de los pacientes.

La doctora Pilar Guerrero, especialista en atención a pacientes adictos a los opioides en el John H. Stroger, Jr. Hospital, indicó que en este centro médico se han incrementado los casos de personas bajo los efectos de estos medicamentos. Señaló que mientras que en 2016 atendió alrededor de 1,000 pacientes, en 2017 recibió la visita de 5,000. Guerrero aseguró que la educación es el principal antídoto para luchar contra esta epidemia.

Internarse en centros para desintoxicar el organismo es una de las opciones, sin embargo, la adicción a la heroína también es combatida con medicamentos como metadona, buprenorfina y naloxona, los cuales deben ser suministrados por bajo supervisión.