Las inundaciones y ráfagas de viento se intensifican en el estado, mientras imágenes dan cuenta de al menos un cocodrilo merodeando por las calles, por lo que las autoridades llaman a la población a tomar todas las precauciones.

Hoffman ha estado volando para brindar ayuda a todos los afectados y este jueves lleva a enfermeros y paramédicos que saben que sus manos hacen falta en Bahamas, pero no saben cuándo van a volver. La célebre chef relata que su misión ha trasladado a varios heridos a hospitales de Nassau.

Imágenes aéreas dejan ver vecindarios enteros que quedaron reducidos a escombros, mientras otras áreas que estaban habitadas siguen cubiertas por el agua. Las autoridades elevaron la cifra de víctimas a por lo menos 20, pero todavía hay decenas de personas desaparecidas.

Más de un millón de personas recibieron orden de evacuación obligatoria ante el peligro de inundaciones, solo en Charleston unos 150,000 habitantes buscaron un lugar más seguro para permanecer mientras pasa el fenómeno, que amenaza dejar sin luz a cerca de un millón de hogares.

Tras volver a categoría 3 el huracán avanza hacia Carolina del Norte con vientos de 115 millas por hora. Se espera que el fin de semana disminuya su intensidad y comience a alejarse convertido en zona de baja presión.

El paso del potente huracán Dorian por el archipiélago de Las Bahamas fue destructivo y letal. El 60% de la comunidad de Marsh Harbour, la ciudad principal de las islas Abaco, quedó totalmente destruido según el primer ministro, Hubert Minnis. La Oficina de Asuntos Humanitarios de la ONU calcula que unas "70,000 personas necesitan ayuda inmediata".