Los hallazgos sobre la vacuna rusa Sputnik V, considerados preliminares, se basan en un análisis de datos de más de 20,000 adultos, en su mayoría blancos, de los cuales el 75% recibió la inmunización y el resto un placebo. Hasta ahora, la inyección ha sido aprobada en 16 países, entre ellos Argentina, Bolivia y Venezuela, y se ha administrado a más de dos millones de personas en el mundo. Más noticias aquí.

Adaptive Construction Solutions, por medio de un programa de su academia Envision Center, capacita a decenas de profesionales en Houston con intereses en diferentes áreas laborales. La financiación de esta iniciativa se da gracias a los aportes federales y comisiones otorgadas por diversas compañías.

La cadena de farmacias informó que este proceso se pondrá en marcha el 11 de febrero y será únicamente, en un principio, para pacientes que cumplan los requisitos de la fase 1A y 1B. Los registros se realizarán por medio de la página www.cvs.com o la línea telefónica 800-746-7287. En ambos canales, se podrá elegir el sitio donde la persona quiere inmunizarse.

Las autoridades de salud anunciaron que a partir de este martes se empezará a enviar un enlace en el que cada paciente, que haya elegido el sistema de notificación en línea, tendrá acceso a todos los detalles sobre su cita para la segunda dosis. Esta medida promete liberar las líneas telefónicas que diariamente reciben miles de llamadas.

La convocatoria para inmunizaciones en el Smart Financial Centre at Sugar Land se abrieron este martes a las 8:00 am y para las 11:00 am los cupos llegaron a su límite. Las autoridades, por otro lado, anunciaron que el condado fue elegido como un proveedor de dosis y recibirá semanalmente cargamentos de vacunas.

Maestros del Distrito Escolar de Houston afirman que existe un miedo generalizado sobre la aplicación de la prueba, ya que hacerlo en persona abre las puertas a posibles contagios de coronavirus. La abogada Sonia González, quien representa a la federación de docentes, asevera que la medida y el riesgo que se toma son innecesarios. Por su parte, activistas creen que la razón de todo esto va ligada con el cumplimiento de contratos que tienen las autoridades educativas a nivel local.