El senador estatal de Kentucky Ralph Alvarado se sube al podio de la convención republicana en horario estelar este miércoles. Es uno de los pocos hispanos invitados como oradores al evento, en el que predominan las caras de blancos caucásicos.

El grupo había permanecido neutral durante sus casi 40 años de historia. Pero este año, dice, es diferente.

Usar piezas sobre la cabeza es una tradición que prevalece desde el Siglo XIX y que se ha convertido en una pintoresca manera de celebrar la devoción por el candidato de un partido.

Tanto delegados como asistentes hispanos han brillado por su ausencia en el evento en Cleveland.

La casualidad que Cruz en broma denominó como algo bien orquestado, causó risas entre los asistentes incluyendo al mismo orador.