El Departamento de Policía de Austin está de nuevo bajo la lupa por la contaminación de cientos de piezas de evidencia biológica para casos de asalto sexual.

Lorenza Valdez no se resigna a la muerte de su hijo Francisco, de 24 años, que murió cuando la policía le disparó el pasado 23 de marzo, luego de que su madre los llamará porque sufría cuadros de depresión.

Las autoridades divulgaron un retrato hablado para tratar de identificar y capturar al hombre que violó a una joven afuera de una iglesia cristiana en Riverside, California.

Según el informe de la policía, el sospechoso aprovechó que la joven se quedó dormida y la llevó hasta un hotel en donde la habría asaltado sexualmente. La investigación también arrojó que el hombre ya tenía cargos relacionados con narcóticos.

El pequeño falleció a causa de los golpes: lo quemaron con un objeto caliente, lo golpearon con la mano y le pegaron con una correa. La madre del bebé y su novio enfrentan cargos por causar lesiones corporales graves a un menor.

El padre del menor contó que el maestro se llevó a su hijo con engaños a un lugar escondido. Según su versión, el hombre lavó las partes íntimas del pequeño antes de dejarlo ir. La escuela fue cerrada hasta que se aclaren los hechos.