Barret juró en la Casa Blanca acompañada del presidente Trump, tras haber sido confirmada en el Senado con 52 votos a favor y 48 en contra. La confirmación de la jueza abre una nueva era en la Corte Suprema de justicia donde los conservadores dominan con 6 de los 9 votos. Más información aquí.

Tras la confirmación de la candidata del presidente Trump al máximo tribunal del país, la preocupación ahora es el balance en el mismo, pues cuenta con seis magistrados conservadores y solo tres liberales, pese a que ella se comprometió a proteger la Constitución y alejarse de sus propias opiniones.

La ahora reemplazante de la difunta jueza Ruth Bader Ginsburg aseguró que hará su trabajo “sin favoritismos”, pese a su marcada tendencia conservadora. Este evento ocurrió en medio de un segundo brote de contagios por coronavirus en la Casa Blanca, por lo que varios de los asistentes portaron mascarillas y trataron de mantener el distanciamiento social recomendado. Más información aquí.

La mañana de este jueves, la Comisión Judicial del Senado vota por la designación de la magistrada Amy Coney Barrett, nominada a la Corte Suprema del presidente Trump, y los republicanos tienen suficientes miembros para lograr su aprobación. En sus audiencias Barrett evadió temas controversiales, pero hizo un señalamiento clave: “nadie está por encima de la ley”.

Hoy la nominada por el presidente Trump, la jueza Amy Coney Barret, enfrenta un segundo día de preguntas durante su audiencia de confirmación a la Corte Suprema, luego que ayer se negara repetidamente a dar sus puntos de vista sobre temas como el derecho al aborto o la ley del cuidado de salud asequible. Ver más de esta noticia.

Barret ha evitado expresar puntos de vista definitivos sobre temas clave como aborto o derechos de la comunidad LGBTQ, pero reitera que reconoce como mentor a Antonin Scalia, considerado un pilar del ala conservadora.