A un mes de haber asumido el poder, Donald Trump sale de Washington en una gira que asemeja a sus mítines de campaña electoral. Desde Melbourne, Florida, lanzó nuevos ataques contra la prensa y reiteró que la construcción del muro fronterizo comenzará muy pronto.

Tomados de las manos y con banderas del país azteca, los manifestantes pidieron cambios en las políticas migratorias de Donald Trump.

Políticos, activistas y ciudadanos expresaron su voluntad de trabajar con sus vecinos estadounidenses y dijeron que El Paso y Ciudad Juárez son una sola ciudad, a pesar de que están divididas por la frontera.

Ante la promesa del presidente Donald Trump de reforzar el muro a lo largo de la frontera sur con México, la Oficina de la Contraloría del Congreso (GAO) advierte que las autoridades deberían encontrar primero un sistema para evaluar su efectividad, algo que no han logrado hasta ahora.

El mandatario republicano negó que existen controversias sobre las acciones de su gobierno y dijo que le pidió al Departamento de Justicia investigar las filtraciones a la prensa.

El exsecretario de Estado de Texas le envió una carta a Trump planteándole la idea, ya que cree que para solucionar el problema fronterizo primero se debe blindar esa entrada por Chiapas, Tabasco y Campeche.