La enfermedad celíaca, de acuerdo con el Departamento de Salud y Servicios Humanos de Estados Unidos, es un padecimiento digestivo. El sistema inmune reacciona ante el consumo de gluten, una proteína presente de forma natural en el trigo, la cebada y el centeno.

A través de una prenda, que hoy nos parece común, las mujeres agregaron un escalón a su lucha por lograr una equidad entre los géneros. Aunque ya ha pasado algún tiempo, lo creas o no, usar pantalones todavía tiene algo de su antaño significado: poder, fuerza y libertad. ¡No por nada es nuestra ropa favorita!

La harina de mandioca, tapioca o harina de yuca es un ingrediente muy conocido por sus propiedades para una alimentación saludable. Si bien contiene bastante azúcar de sus carbohidratos, no tiene gluten. Si se consume con fuentes de fibra, como semillas de lino o chía, es un alimento excelente para el sistema digestivo.

Una dieta sin gluten supone la exclusión de esta proteína encontrada en el trigo, la cebada y el centeno. Es recomendada para aliviar los síntomas de la enfermedad celíaca, entre otras condiciones. Por otro lado, si bien se afirma que es beneficiosa para fortalecer la salud y adelgazar, no existe evidencia científica que respalde estos beneficios, como confirma Mayo Clinic.

Una persona con intolerancia al gluten experimenta problemas para procesar y asimilar esta proteína que se encuentra en la avena, en la cebada, en el trigo y en el centeno. Esta condición puede responder a una alergia alimentaria o bien a la enfermedad celíaca, según la American Academy of Allergy, Asthma & Immunology.

Te dicen que no comas gluten, harinas refinadas, arroz blanco ni azúcar. Pero las dietas mágicas no existen y muchas veces son diseñadas por personas sin formación en nutrición. Hoy queremos traerte información de expertas para desterrar algunos mitos y contarte en qué casos es recomendable consumir harina blanca y otros alimentos refinados.