Enrique García Fuentes

Sin contar con los recursos necesarios, Doris Aguirre se las ha ingeniado, por medio de rifas y llamados a la comunidad, para poder recolectar dinero, comida y productos de primera necesidad que sirvan de auxilio a quienes lo perdieron todo, principalmente si son niños. Asegura que este esfuerzo que hace “tan solo es una gota en un océano que hace una gran diferencia”. Más noticias aquí.

Los exempleados del lugar, el cual está ubicado en Illinois, alegan que durante la pandemia estuvieron expuestos constantemente al coronavirus y que, en algunos casos, llevaron la enfermedad a sus respectivos hogares. Agregan que en plena emergencia les prometieron que sus salarios incrementarían, pero al parecer esto solo fue una estrategia para que continuaran laborando allí.

La pandemia de coronavirus ha obligado a muchos hispanos a buscar el sustento diario en las calles de la ciudad, donde se ha visto un aumento de vendedores ambulantes sin licencia. Tal es el caso de María Elena Nicacio y Victoria Malagón, quienes se vieron obligadas a vender nopales y envases de plástico para poder pagar las facturas y la renta. Más información aquí.

Marlen Ochoa-Uriostegui, de 19 años de edad y a punto de dar a luz, fue vista por última vez el pasado 23 de abril. La policía encontró tan solo hace unos días el vehículo de la mujer abandonado en el suroeste de la ciudad, mientras que sus vecinos y amigos se han unido en una intensa búsqueda para dar con su paradero. Por su parte, los familiares aseguran estar convencidos de que este no pudo ser un caso de abandono.

El siniestro ocurrió en una planta de siliconas de Waukegan, al norte de Chicago, y las autoridades están buscando a otros dos individuos, que se presume, también fallecieron. Sin embargo, las labores de los rescatistas se complican porque la estructura está debilitada y en cualquier momento se podría caer.

Bertha Espinoza, quien vive en Chicago desde hace 28 años, asegura que ha pasado varios inviernos con hoyos en el techo y paredes de su casa. Sin embargo, gracias al proyecto Educación Comunitaria Telpochcalli ella por fin tendrá un hogar caliente.