“Vámonos al cielo”, le dijo Ana Ester Segovia, de 31 años, a varios testigos que estaban presentes cuando presuntamente intentó incendiar, de forma intencional, un vehículo el que estaba con sus hijas de 9, 11 y 13 años. La mujer está bajo custodia de las autoridades y será sometida a una evaluación mental.

Por el momento son cinco las víctimas de Nassar las que se animaron a demandar en el condado de Harris al Comité Olímpico Estadounidense, a USA Gymnastics, a la Federación Internacional de Gimnasia y a la Universidad Estatal de Míchigan, bajo el argumento de que fallaron en brindar las condiciones de seguridad necesarias a las menores, quienes estaban en manos de un depredador.

Después de tres días de juicio, el jurado declaró culpable al acusado por el grave abuso contra dos menores y ahora espera su sentencia por parte del juez.

Este miércoles dio su testimonio la doctora que atendió a los menores de 4 y 3 años después de haber estado encadenados durante varios días en una residencia de San Antonio.

El inmigrante mexicano Vicente Benavides Figueroa, de 68 años, fue condenado en 1993 a la pena capital por el asesinato y violación de una bebé de 21 meses, pero las pruebas médicas que lo inculparon resultaron ser erróneas. La Corte Suprema de Justicia de California anuló esa sentencia y ahora el condado Kern lo dejará en libertad tras decidir que no lo volverá a enjuiciar por este caso.

Así lo dieron a conocer las menores de 6, 9 y 12 años de edad, quienes contaron a las autoridades en México que su madre las golpeaba si ellas se negaban a estar con los sujetos. La mujer huyó con su pareja y ahora las pequeñas esperan que algún familiar pueda hacerse cargo de ellas.