Una mujer de 48 años de Maricopa, Arizona, y sus dos hijos mayores, fueron arrestados por presunto abuso infantil. Los menores, a los que la mujer sacó de la escuela, aseguran que para castigarlos su madre adoptiva los encerraba en un armario durante horas, sin agua, comida ni acceso a un baño.

Según Rafael Mendoza, una de las víctimas, nunca vio mal estas acciones porque confiaba en el cura.

El bebé, identificado como Aiden Rodríguez, presentaba un traumatismo en la cabeza cuando fue transportado en condición grave a un hospital de El Bronx, según la policía. En la madrugada de este martes, las autoridades respondieron al reporte sobre un aparente caso de abuso infantil que se habría registrado dentro de un apartamento del condado. Se investigan las causas que rodearon la muerte del menor.

Johnnie Barto, de 71 años, deberá pasar el resto de su vida en prisión luego de que fuera condenado por aprovechar su cargo para "saciar sus propios deseos enfermizos". Las víctimas fueron principalmente pacientes suyos, aunque también hay familiares, y los más jóvenes fueron un bebé que comenzaba a caminar y otro de solo dos semanas.

Nuevas evidencias fueron removidas de lugar donde el Noah McIntosh de 8 años vivía. Sin embargo, las autoridades mantienen su hermetismo con respecto al hallazgo y las razones por las que un plomero con cámaras fue llevado al lugar.

María De Jesús López, de 45 años, insistió en que los padres de su nieta debían ocultar el crimen y les dio su carro y también dinero suficiente para que viajaran a Tijuana y desaparecieran los restos de la bebé de 3 años.