Lanzan campaña nacional de mensajes a Obama para que detenga política de deportaciones
Lanzan campaña para inundar la Casa Blanca con mensajes en contra de plan de redadas y deportaciones masivas


Organizaciones pro-inmigrantes, de derechos civiles y religiosos lanzaron el martes una campaña para inundar la Casa Blanca con un solo mensaje al Presidente Barack Obama: que detenga su política de deportaciones.
La estrategia también incluye llamar y dejar un mensaje en la planta telefónica.
“La Administración Obama debe poner fin a los planes para deportar a familias centroamericanas”, dijo la Coalición por los Derechos Humanos de los Inmigrantes de Los Angeles (CHIRLA) durante una conferencia de prensa celebrada el martes.
Las preocupaciones aumentaron el jueves de la semana pasada luego que el diario The Washington Post publicó una nota señalando que el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) ultimaba un plan de redadas para deportar, a partir de enero, a cientos, quizás miles de inmigrantes indocumentados centroamericanos que perdieron sus casos de asilo y recibieron una orden final de deportación.
Una “bofetada”
"Los planes para deportar familias centroamericanas son horrendos, mezquina y una bofetada en la cara a todo lo que representa Estados Unidos, incluida la justicia, el debido proceso y la búsqueda de la vida, la libertad y la felicidad”, dijo Angélica Salas, directora ejecutiva de CHIRLA.
El American Immigration Council ha dicho que la respuesta que el Gobierno de Obama está dando al tema de los migrantes centroamericanos que huyen de sus países para buscar refugio en Estados Unidos, es “dura” y en algunos casos “excesiva”.
“Nuestro gobierno ha respondido con la aplicación de medidas duras que a menudo fallan en proporcionar a cada familia una oportunidad justa para solicitar asilo”, dijo Ben Johnson, director ejecutivo del concejo.
Debido proceso
“Estas familias de América Central, en su mayoría mujeres y niños, están huyendo de la persecución y la violencia en los países de origen”, indicó Salas. “Estos seres humanos suplican protección, misericordia y el apoyo de nuestra nación. En cambio, nuestro gobierno viola su debido proceso, niega a casi todos ellos la oportunidad de una vida mejor y ahora planea deportarlos en masa sin tener en cuenta si van a vivir o morir” cuando sean expulsados y retornen a sus países.
“Hacemos un llamado a la administración de Obama y el DHS para detener todos los planes para deportar familias centroamericanas y ofrecer soluciones humanas y justas”, agregó.
CHIRLA dijo que le pedía al público que inunde la Casa Blanca con llamadas al teléfonos (202) 456-1111 y envíe tarjetas postales al presidente Obama solicitándole que cambie su política de deportaciones y proteja a los migrantes centroamericanos.
Prioridades de deportación
La Oficina de Inmigración y Aduanas (ICE, por su sigla en inglés) dijo a Univision que una de sus prioridades de deportación, incluidas en el memorando del 20 de noviembre de 2014, cuando el presidente Obama anunció la Acción Ejecutiva, son inmigrantes que entraron al país después del 1 de enero de 2014, no tienen un caso de asilo y recibieron una orden final de deportación.
- Prioridad 1: Quienes sean considerados una amenaza a la seguridad nacional, de la frontera o pública (terroristas, personas involucradas en espionaje, criminales, pandilleros, entre otros);
- Prioridad 2: Personas con historial extenso de violaciones de inmigración, quienes hayan cruzado la frontera recientemente (después del 1 de enero de 2014).
- Prioridad 3: Personas con DUI, cargos por violencia doméstica, explotación sexual, robo y cualquier delito que tenga más de 90 días como penalidad de cárcel;
- Prioridad 4: Inmigrantes con una orden final de deportación en o después del 1 de enero de 2014.
La ola continúa
Entre el 1 de enero de 2014 y finales de noviembre del año en curso, más de 100,000 migrantes centroamericanos, la mayoría niños, intentaron ingresar indocumentados a Estados Unidos y fueron arrestados por la Patrulla Fronteriza.
En los meses de octubre y noviembre, los dos primeros del año fiscal 2016, las detenciones aumentaron significativamente en comparación con el año pasado. Las cifras alarmaron a la Casa Blanca.
La mayoría de los detenidos entre 2014 y 2015 fueron liberados con una orden para presentarse ante una corte de inmigración para que un juez decida sus futuros en el país. El resto permanece en centros de detención de ICE o en centros de acogida del Departamento de Salud y Recursos Humanos (HHS).
Una ley aprobada por el Congreso en 2008 para prevenir el tráfico humano prohíbe que menores de edad que no sean de países fronterizos (México y Canadá) sean deportados de inmediato y permite que se presenten ante un juez de inmigración y gestionen un pedido de asilo.
Pero “con demasiada frecuencia las familias de refugiados son detenidas”, algunos en cárceles privadas “y luego liberadas de la custodia de inmigración sin la información adecuada acerca de cómo seguir sus casos de asilo, cuándo y dónde ir para sus audiencias en la corte”, errores que terminan lamentablemente con una orden final de deportación, dijo Johnson.
Protesta en DC
Simultáneamente a la campaña de llamados y envío de postales, unas 40 organizaciones se unieron para convocar a una protesta este miércoles frente a la Casa Blanca en protesta por las redadas planificadas en contra de familias inmigrantes que huyen de la violencia.
“La mayoría de los migrantes en la mira son mujeres y niños que huyen de la violencia en Guatemala, El Salvador y Honduras”, dijo Kimberley Propeak, de CASA de Maryland.
La organización teme, teniendo en cuenta las estadísticas elaboradas por el TRAC Research Center, que el área del Distrito de Columbia puede sufrir un gran número de redadas si avanzan los planes del DHS.
“Los defensores de toda la región se esfuerzan por preparar a las comunidades locales aterrorizadas”, dijo CASA de Maryland. “Saldremos este miércoles a las calles comenzando en las oficinas del Partido Demócrata, luego por las oficinas de ICE y terminaremos en la Casa Blanca”, explicó.
Tanto la campaña de llamadas telefónicas y envío de tarjetas postales como la protesta en Washington están respaldadas, además de CASA y CHIRLA, por el Sindicato 32BJ del SEIU, ACLU of Maryland, el Advancement Project, Alabama Coalition for Immigrant Justice, America’s Voice, Aquinas Center of Pennsylvania, Arkansas United Community Coalition, Asian American Center of Frederick, Beats Rhymes & Relief, Casa de la Cultura of Gettysburg, Casa San Jose of Pittsburgh, Causa Oregon, Center for Popular Democracy, El CENTRO de Igualdad y Derechos of New Mexico, Church World Service, Council on American-Islamic Relations (CAIR), Empowerment Temple, Equity Matters, Fair Immigration Reform Movement, Freddie Gray Project, Frederick Immigration Coalition, Grupo de Apoyo e Integración Hispanoamericano of the LeHigh Valley, Illinois Coalition for Immigrant and Refugee Rights, Justice League NYC, The Leadership Conference on Civil and Human Rights, LULAC, Making Change, Maine Immigrant Rights Coalition, Maine People’s Action, Massachusetts Immigrant and Refugee Advocacy Coalition (MIRA), Michigan United, NAKASEC, National Center for Lesbian Rights, New Sanctuary Movement, One America, Pennsylvania Immigration and Citizenship Coalition, PICO, Promise Arizona, Purple Moon Project, Texas Organizing Project, Universal Zulu Nation y la Virginia Coalition for Immigrant Rights.
Las organizaciones señalaron que en 2016 las protestas continuarán.









