Salud bucal de tus pequeños: evita estos errores comunes
Texto: Cintia Saporito
Con cepillarles los dientes no alcanza para cuidar la salud bucal de los hijos. Hasta la mamá más dedicada podría acabar cometiendo pequeños errores que afectaran su higiene oral. Descúbrelos ¡y evítalos!
‘Baby teeth’: nada pasajeros
Los primeros dientes de tus pequeños son importantes por diferentes razones. No sólo los ayudarán a hablar claramente y a masticar con naturalidad, sino que marcarán el camino que, llegado el momento, seguirán sus ‘permanent teeth’, explicó Bruno Sharp, dentista de los consultorios Sharp Dentistry, en Florida. ¡Cuidarlos es fundamental!
Hábitos para esquivar
Aun sin haberlo notado, hay muchos hábitos cotidianos que podrían afectar la boca de tus hijos. Checa a continuación algunas cuestiones a las que deberías estar atenta, según el dentista Peter V. Vanstrom, miembro de la Academia de Odontología General.
1. Permitirles masticar objetos duros. Lo sabemos, los niños adoran hacer crujir el hielo o los dulces. Pero esto podría causarles fracturas en los dientes. Y si los ‘candies’ tienen azúcar, ¡doble problema!
2. Reemplazarles el agua por sodas y bebidas energéticas. Contra lo que afirman algunos comerciales, los niños no necesitan bebidas "especiales" para rehidratarse o tener más energía. Los azúcares y ácidos en estos ‘drinks’ favorecen el deterioro dental.
3. Cepillarlos con demasiada fuerza. Al limpiarlos con mucha intensidad, los dientes y raíces pueden dañarse, y también podría suceder una recesión de las encías. ¿La clave para evitar estos problemas? Desde pequeños, enseña a tus hijos a higienizarse gentilmente para remover la placa en formación. ¡No hay necesidad de ser agresivos en exceso! Además, los cepillos de poliéster suelen ser más suaves y efectivos para los niños que los de nylon.
4. Dejarlos comerse las uñas. Aparte de ser un mal hábito, podrían acabar con sus dientes delanteros fracturados y/o astillados. Para combatirlo intenta: pintarles las uñas con laca de mal sabor, mantenerles las manos ocupadas con objetos antiestrés y/o hacerlos tomar conciencia cuando lleven sus dedos a la boca.
5. Y chuparse el dedo. Muchísimos ‘toddlers’ lo hacen y, aunque te parezca inofensivo, este hábito puede deformar los arcos superior e inferior de la boca, y alterar la posición de los dientes.
6. Recostarlos con un biberón. Mientras que el calcio es fundamental para que desarrollen una dentadura y huesos fuertes, la leche contiene azúcares que pueden favorecer la caries. Al ir a la cama con la botella, los niños terminarán durmiéndose sin cepillarse los dientes. Las bacterias que causan ‘cavities’, ¡felices! ¿No quieren renunciar a su biberón? Llénalo de agua, recomendó el dentista Brian B. Nový, del Instituto DentaQuest en Boston.
Si tienes dudas acerca del cuidado de la salud bucal de tus hijos, consulta a un dentista pediátrico.