Cada uno es capaz de notar las características de la personalidad de los otros, pero es muy difícil hacerlo con uno mismo. A veces no tenemos conciencia exacta de qué tan agradables somos y quizá tengamos una idea errada de nuestra personalidad. A continuación te mostraremos algunas de las características que tienen las personas agradables. Compara los puntos con los rasgos de tu personalidad y saca tus propias conclusiones.

Las creencias de cada uno conforman su realidad. Son la materia con la que está construido el prisma por el que observamos y vivenciamos el mundo. Si estas creencias son positivas y nos vinculan con estados de buena salud y equilibrio mental, de seguro nuestra realidad estará en consonancia con ellas.

«Ay, las matemáticas no sirven para nada. ¿Cuándo fue la última vez que usaste un trinomio cuadrado perfecto? ¿Ya ves? NUNCA». Así dijimos todos en algún momento de nuestra vida. En el fondo sabemos que recurrimos a las matemáticas más de lo que nuestras versiones adolescentes querrían admitir. Pero, ¿te imaginas utilizar una regla científica para tener éxito, incluso en el amor?

Cumplir 30 años tiene muchas ventajas: deja de importarte el ‘qué dirán’, tienes mayor estabilidad financiera y sabes lo que quieres en la vida. Sin embargo, también es necesario dejar atrás algunos hábitos de cuando eras más joven, todo por el bien de tu salud tanto física como emocional.

No siempre uno hace lo que le gusta. A veces hay que cumplir con ciertas tareas que no son las más agradables, lo que puede ser frustrante. Sería ideal un mundo donde cada quien haga lo que le plazca, ¿no te parece?

Todos tenemos momentos de poca productividad, de sentirnos desanimados y cansados. Sin embargo, la clave para remediarlo está en la perspectiva que tomamos ante las cosas que suceden en nuestra vida.