Todos tenemos un amigo que recorre la vida a su propio ritmo, que nunca se deja encasillar en los moldes que la sociedad pretende establecer y siempre tiene una sonrisa o palabras de aliento que regalarnos.
Estas son algunas de las lecciones que nos dejan nuestros amigos de espíritu libre
Por:Avon
Siempre que lo vemos nos preguntamos cómo es que lo logra, de dónde saca esa pasión para vivir y el valor para enfrentar sus miedos. Simplemente nos inspira y desearíamos poder tener esa misma libertad de pensamiento.
Aunque parezca difícil, nosotros también podemos tener un espíritu libre, solo tenemos que modificar algunos aspectos importantes en nuestra vida para así romper las ataduras y una buena manera de iniciar es aplicando las siguientes lecciones que nos enseñan nuestros amigos de espíritu libre.
1. Tus decisiones, pensamientos y acciones no dependen de la aprobación de otros
Desde muy pequeños nos enseñaron que nuestras decisiones y actos debían estar destinados a complacer a nuestros padres. Obtener su aprobación hacía que nos sintiéramos validados y valiosos.
El problema de ir por la vida complaciendo los deseos de otras personas es que dejamos de hacer eso que nos llena y nos hace felices. Cierra los ojos, piensa qué es lo que quieres en este momento de tu vida y que ese sea tu objetivo. Atrévete a olvidar el qué dirán e inicia un camino solo, este será el primer paso de tu nueva vida.
2. Hay que ser auténtico y espontáneo
Si vas caminando por la calle y te dan unas repentinas ganas de bailar, baila. Si en el auto escuchas una canción y solo se te ocurre cantar, canta. La espontaneidad es una de las cualidades que nos ayudan a mostrarnos tal y como somos, así como un indicador de que no nos importa lo que la gente diga sobre nosotros.
Evita a toda costa parecerte a alguien más, no te dejes llevar por las modas, todos tenemos un estilo propio, encuentra cuál es el tuyo y presumelo al mundo, sé auténtico, ese tipo de honestidad te abrirá las puertas a muchos lugares.
3. Detente a apreciar las pequeñas cosas de la vida
Nos tocó existir en una época donde se vive a toda velocidad, siempre estamos buscando la manera de experimentar nuevas sensaciones o satisfacer nuestras necesidades de la forma más rápida, olvidando que las cosas buenas requieren tiempo.
Detente, date un respiro, cierra los ojos y aprecia las pequeñas pero valiosas cosas de la vida, recuerda esa interesante conversación con tu persona favorita, aquel paseo por la playa cuando hiciste una retrospectiva a tu vida o como te recibe tu mascota siempre que llegas a casa. Esas pequeñas cosas son la base de la felicidad.
4. Reconoce la belleza que hay fuera de los estándares convencionales
Una flor no es hermosa solamente cuando está abierta en su máximo esplendor, también lo es cuando llega al fin de su vida y va soltando poco a poco sus pétalos, como un legado que nos recuerda lo feliz que nos hacía mirarla.
La belleza está presente en todos los aspectos de la vida, incluso en las malas experiencias ya que es de estas donde aprendemos las mejores lecciones. La próxima vez que mires a tu alrededor busca lo bello más allá de los estándares convencionales.
5. Los apegos detienen nuestro potencial
Hay personas valiosas que llegan a nuestra vida a darle un nuevo sentido, a mostrarnos cosas que nunca habíamos notado y a ser un perfecto complemento de nuestro día a día. Sin embargo, también hay personas que más que aportar pueden convertirse en un lastre.
Ningún exceso en la vida es bueno, el apegarse a alguien de una manera excesiva puede causar una pérdida de identidad, integridad y expresión propia. Si tu compañero de vida es una persona valiosa, sabrá darte tu espacio para que el fuerte apego no frene tu potencial.
6. Ama incondicionalmente
Una vez que aprendas a identificar quiénes son esas personas valiosas que llegaron a tu vida a comprender, aportar y ser un gran complemento, estarás listo para entregar tu corazón con la garantía de que esa persona especial sabrá apreciarlo.
El amor incondicional es la muestra más fuerte de este sentimiento, cuando encuentres la persona indicada ama sin medida, sin restricciones, sin miedo. Si en algún momento ambos tienen que separar caminos, estarás tranquilo al saber que todo lo que sentiste y mostraste fue honesto y hermoso.
7. Vive sin miedo y confía en ti mismo
Una vez que aprendas a actuar sin el objetivo de complacer a alguien más, cuando te muestres tal como eres sin ocultar tu espontaneidad, te des un tiempo para apreciar las pequeñas cosas de la vida y la belleza del todo, habrás aprendido lo necesario para confiar en ti mismo.
Tendrás las herramientas necesarias para combatir el miedo, ese sentimiento que no nos permite crecer y te darás cuenta que la felicidad está más cerca de lo que imaginas.
Sin lugar a dudas, aprender estas lecciones es lo mejor que puedes hacer para darle un giro de 180 grados a tu mundo, para poder experimentar la verdadera libertad y, sobretodo, crear la vida que amas. ¿Estás listo para hacerlo?
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