Disparos, gas pimienta y estampidas de personas han sido la constante en Miami Beach durante el periodo de vacaciones conocido como 'spring break'. Las autoridades de esa zona turística de Florida implementaron un toque de queda para tratar de controlar la situación. Dos sujetos de Carolina del Norte fueron arrestados por presuntamente violar, drogar y dejar inconsciente a una mujer que después murió dentro de una habitación de un hotel. Más información aquí.

Clay Jenkins afirmó que la comunidad en el área está respetando las medidas de bioseguridad para mitigar la propagación de la enfermedad. El juez también aseguró que no se ha visto un incremento en los casos de contagio desde que el gobernador de Texas, Greg Abbott, eliminó el uso obligatorio de mascarillas, pero gracias al comportamiento de los habitantes.

El Departamento de Salud de Houston asegura que esta semana cuenta con más de 20 sitios de atención a la comunidad para la toma de pruebas de coronavirus, los cuales están ubicados estratégicamente alrededor de la ciudad. Las autoridades recalcaron que los exámenes son gratuitos, no importa el estatus migratorio del paciente y los resultados están disponibles en máximo dos días.

Durante el fin de semana se evidenciaron actos de vandalismo, peleas y desorden en la ciudad, por lo que las autoridades tuvieron que reunirse de emergencia y tomar medidas estrictas, como el toque de queda, que entró en vigor el pasado sábado y que se implementará de jueves a domingo en las zonas de alto impacto, como la Ocean Drive y la avenida Pennsylvania, desde la calle 5 hasta la 16.

Los turistas que normalmente dejan las playas destruidas para esta época, ignoraron cualquier guía de bioseguridad y obligaron a las autoridades a imponer un toque de queda. Descarga gratis Uforia App.

Imágenes dan cuenta de los intentos de las fuerzas del orden por contener el caos en Miami, y se suman a las que han difundido empleados de hoteles donde se puede ver el desastre en varias habitaciones. Lo que más preocupa a las autoridades es que los tumultos puedan derivar en una preocupante alza en los contagios de covid-19.