El padre Allan Figueroa Deck explica que los feligreses pueden estar en el hogar, con sus familias y otras personas con las que pueden reunirse, pues “nosotros los latinos tenemos una tradición de religión doméstica, no solo celebramos la fe en el templo, sino también en casa”. Enfatiza en que “podemos rezar el Rosario, leer la Sagrada Escritura, orar, arreglar un altar”, entre otras cosas.

Los obispos católicos llamaron a debatir las terapias de conversión en un ambiente de respeto y fomentar el diálogo sereno, pues han atestiguado cómo legisladores, profesionales y líderes religiosos se enfrascan en discusiones que rayan en altercados, insultos y hasta amenazas.

Feligreses acudieron a las iglesias de Sacramento para celebrar el Viernes Santo en espacios designados al aire libre y siguiendo las medidas de higiene.

El padre de la iglesia Santa Genoveva Andrés Beltrán asegura que en todas las parroquias en el área de Chicago se están llevando los protocolos para evitar los contagios con coronavirus y que las personas deben inscribirse antes de asistir para celebrar la eucaristía.

Los servicios religiosos se reanudan en el Área de la Bahía, con la posibilidad de recibir a un número limitado de feligreses y respetando el uso de cubrebocas.

Autoridades eclesiásticas informaron que la comunidad sí podrá ingresar a las iglesias de Austin durante este Viernes Santo. Sin embargo, se fomentará el distanciamiento social y el uso del cubrebocas.