Los trabajadores de General Motors centran la medida, luego de que su contrato con el sindicato terminó este fin de semana. Más de 50 plantas en nueve estados permanecen cerradas. Y mientras Trump pide que haya acuerdo, Joe Biden y Elizabeth Warren manifestaron su respaldo a los trabajadores.

Grupos de trabajadores de General Motors del sindicato United Auto Workers comenzaron a instalar los primeros piquetes la noche del domingo en la que es la primera huelga de operarios desde 2007, al fracasar las negociaciones con la compañía para un nuevo contrato que mejore sus condiciones salariales, de atención médica y participación en los beneficios.

La agencia Allcare fue denunciada por 13 empleados inmigrantes que dicen haber sido despedidos por su estatus migratorio, luego de que esta se negara a reembolsar sus salarios no pagados y amenazara con llamar a ICE. Los afectados decidieron llevar el caso hasta la fiscalía del estado de Nueva York y este viernes se determinó que la empresa tendrá que pagar a más de 100 cuidadores domiciliarios cerca de 450,000 dólares y al grupo de denunciantes 8,000 dólares adicionales por daños emocionales.

El trabajador, de 59 años, se encontraba realizando las labores en una grúa cuando una camioneta lo chocó y provocó que terminara en el suelo. Los hechos se registraron en el sector de Elmhurst. Aunque fue llevado a un hospital, murió poco después.

Desde el pasado mes de marzo los empleados están intentando buscar mejoras laborales, pero no se han logrado poner de acuerdo con las empresas, por lo que esta es una semana crítica en las negociaciones.

Las nuevas medidas, que fueron aprobadas por la legislatura estatal y que son el resultado de décadas de lucha por parte de los jornaleros, entrarán en efecto en enero de 2020. Ahora varias organizaciones, junto con el Departamento de Trabajo, mantienen un proceso para revisar estas nuevas reglas e instruir a los trabajadores.