En solo 48 horas, miles de indocumentados han cruzado a través de la frontera de Texas; las autoridades rescataron a varios migrantes de los peligros que corren al tratar de llegar a EEUU. Por su parte, el gobernador Greg Abbott habló de una crisis y culpó a los migrantes del aumento de contagios por coronavirus.

Legisladores de Long Island aprobaron un proyecto de ley que permitirá a agentes de policía y otros socorristas demandar a manifestantes; aquellos que los acosen, amenacen o hieran serán multados con una suma desde 25 a 50 mil dólares.

Cientos de bomberos continúan luchando contra los incendios en el norte de California. El fuego calcina más de 15 mil acres, por lo que se le pide a la población mantenerse alerta ante posibles órdenes de evacuación.

A dos años de la masacre en El Paso, Texas, en donde 23 personas perdieron la vida y otras resultaron heridas a manos de un supremacista blanco, el presidente Joe Biden publicó un escrito en donde conmemoró la memoria de las víctimas y reiteró su llamado de unidad frente al odio y la violencia.

Estados como Louisiana y Florida registran alarmantes cifras de contagios de covid-19, mientras se alcanza la meta de vacunar al 70% de adultos en toda la nación; sin embargo, la preocupación crece entre padres de familia cuando el próximo ciclo escolar está a punto de comenzar con clases presenciales.

En el sur de Texas, un grupo grande de personas indocumentadas llegó a la frontera, el cual está siendo procesado por los agentes de migración y en el que se encuentran varios niños y niñas no acompañados. El gobierno Biden anunció la extensión oficial del Título 42 de los CDC, medida que permite expulsar migrantes bajo el argumento de la pandemia.