Juan Carlos Aguiar

Seguramente no es sencillo para otros almacenes Walmart en la ciudad texana abrir sus puertas en estos días, como tampoco debe serlo para la gente acudir a hacer compras. Sin embargo, la urbe poblada mayoritariamente por hispanos vence el temor y retoma poco a poco sus actividades cotidianas.

Siguen las largas filas de hombres y mujeres que quieren donar sangre, e incluso una compañía de transporte está ofreciendo viajes gratis con ese propósito. Pero se están dando otras muestras de ayuda: ofrendas florales, vigilias, donaciones de dinero y hasta en servicios.

Se multiplican las vigilias en memoria de los fallecidos en la balacera, pero también pidiendo por la recuperación de las personas heridas. Lugares públicos en Texas lucen altares improvisados, mientras los sobrevivientes no contienen las lágrimas al recordar lo que vivieron y lo que sintieron aquel sábado de terror.

Unos 72 pacientes, entre embarazadas, niños con discapacidad y enfermos crónicos, llegaron este domingo al Aeropuerto Internacional de Miami en un vuelo chárter procedente de San Juan, gracias a una iniciativa del expelotero de las Grandes Ligas Jorge Posada.

En las imágenes se observa los destrozos de la furia del huracán en esta ciudad: Varias casas trailer en Florida fueron cercenadas completamente y en su lugar solo quedan las planchas de cemento.

Las ráfagas dejaron caos e inundaciones. Habían lanchas en las calles y hasta casas en el agua o en las vías. Muchos no han podido regresar a sus hogares.