Maribel Feliciano, directora asistente del condado, explicó que los albergues se encuentran preparados para abrir en caso de que los efectos del fenómeno natural provoquen situaciones graves. También advirtió a los residentes que pueden registrarse líneas o árboles caídos, las cuales deben reportarse de inmediato a las autoridades correspondientes.

Los residentes pueden acudir a diferentes puntos de la ciudad para abastacerse con estos elementos. Se están entregando cerca de seis bolsas de arena por cada vivienda y las personas deben presentar su ID. También se reportan extensas filas en los lugares.

El Centro Nacional de Huracanes indicó en el boletín de las 11:00 de la mañana que el huracán ha disminuido su velocidad de movimiento y avanza a solo 8 millas por hora. La nueva trayectoria pronosticada señala que su recorrido tomará una curva hacia el norte y no tocará tierra en Florida, sin embargo las autoridades han insistido en no bajar la guardia todavía.

Durante una rueda de prensa, Carlos Giménez aseguró que "es demasiado temprano para bajar la guardia" y aseguró que el cambio en la trayectoria pronosticada no implica que no haya condiciones peligrosas como vientos tropicales y posibilidad de mareas altas. Insistió en la necesidad de contar con la cantidad de agua y comida necesaria y estar preparados para salir en caso de una evacuación.

Si durante el cierre de las oficinas por la alerta de huracán usted tiene una emergencia en temas de inmigración, deberá enviar un mensaje de texto con la siguiente información: Nombre completo, número de teléfono y un breve resumen del problema.

Las terminales aéreas continuarían manteniendo sus horarios normales para este sábado, de acuerdo a las informaciones. Sin embargo, se recomienda a las personas confirmar el estado de los vuelos con las aerolíneas y llegar con anticipación.