En el Centro Penitenciario de los Llanos, que opera en la localidad central de Guanare, estado Portuguesa, ocurrió durante la mañana una protesta de reclusos que exigían el ingreso de alimentos elaborados por sus familiares, la cual culminó en un motín y tres enfrentamientos armados entre los reos y guardias nacionales.

El peruano Carlos Uzategui, quien estuvo detenido dos meses en el Orange County Correctional Facility, en Nueva York, aseguró que las autoridades del lugar "no estaban preparadas para la pandemia", situación que habría llevado a varios presos a enfermarse, ya que, según él, no contaban con elementos básicos de protección como mascarillas, guantes o desinfectantes.

El número de contagios entre los presos de correccionales estatales ha ido en aumento, por lo que familiares y activistas piden que aquellos que están en riesgo de contraer coronavirus sean liberados.

Una jueza federal ordenó que los tres centros del área liberaran a los inmigrantes que no tienen cargos penales y a los que padecen enfermedades crónicas debido al coronavirus. Luego del fallo, este viernes, médicos y familiares de presos en Broward se unieron para protestar por la falta de medidas de protección en estas cárceles y pedir que cumplan con la decisión de la magistrada.

Se investiga la muerte de un oficial del condado Bexar que presuntamente había dado positivo por coronavirus. Dariela Macías habló con el alguacil Javier Salazar sobre lo ocurrido.

Un juez federal exigió que 350 inmigrantes fueran dejados en libertad o transferidos a otros centros antes del 30 de abril con el fin de que los presos restantes pudieran mantener una distancia de 6 pies entre sí mientras duermen, comen o se duchan. La Coalición Justicia para Inmigrantes dice que el centro no solo no ha cumplido, sino que además estaría forzando a los arrestados a trabajos de limpieza.