Oscar Quintero y Martha Méndez, quienes se dedican a la renta de viviendas en el área de Houston aseguran que los recursos destinados a ayudarlos son escasos, incluyendo los que brinda el gobierno.

La nueva medida fue aprobada por el juez presidente de la Corte Municipal. Mientras, se exhortó a los inquilinos a tomar en consideración la prohibición de los CDC sobre los desalojos por falta de pago del alquiler debido a la pérdida de ingresos relacionada con COVID. El programa entró en vigor el 4 de septiembre, días después de que expirara una moratoria de Pensilvania. Requiere que se cumplan ciertas condiciones y que el inquilino haya solicitado ayuda relacionada con problemas de alquiler para calificar.

Los propietarios de casas y apartamentos aseguran que su propósito nunca ha sido dejar sin hogar a los inquilinos, pero también tienen responsabilidades económicas que deben resolver. Precisan que a ellos los bancos e inversionistas les exigen cumplir con las cuotas sin importar que no les paguen la renta. Dicen que las ayudas destinadas para auxiliarlos son escasas, incluidas las del gobierno.

"Impotente, así me siento", dice Wilmer Briso, quien asegura que renta un cuarto con su esposa y sus cuatro hijos en la parte trasera de una vivienda en North Hills. El dueño de la vivienda dice que por esta razón ellos no son sus inquilinos.

Wilmer Briso asegura que durante dos años ha alquilado un cuarto con su esposa y sus cuatro hijos en la parte trasera de una vivienda en North Hills y que debido a la pandemia del coronavirus no ha podido pagarle al dueño los últimos dos meses. Por su parte, el propietario del lugar niega esta versión y dice que él los "recogió de la calle".

Los inquilinos de Filadelfia ganaron un poco de tiempo al aprobarse una moratoria temporal que los protege de los desalojos. Sin una propuesta formal, la tranquilidad es pasajera y el temor a quedar en la calle aumenta.