La policía de Nueva York desalojó este miércoles un campamento de inmigrante que se había instalado en los alrededores de un refugio en Randall’s Island. El operativo provocó protestas por parte de los indocumentados que aseguraron estar frustrados y necesitar un permiso de trabajo para poder conseguir un lugar donde vivir permanentemente. Te puede interesar: Arizona votará propuesta que permite a las autoridades arrestar a inmigrantes en la frontera.

Familias inmigrantes latinas que viven en RVs en San Francisco enfrentan desalojo inminente. Buscan soluciones viables para no separarse de sus hijos.

Varias familias inmigrantes que viven en casas rodantes ubicadas en una vía detrás del zoológico en San Francisco están preocupadas tras recibir una notificación de desalojo. “Es injusto lo que están haciendo con nosotros. Aquí no molestamos a nadie”, dijo un hondureño afectado. Ante esto, las personas están pidiendo la ayuda de la ciudad. Te decimos qué dicen las autoridades sobre este tema.

Hace más de tres años 156 familias fueron evacuadas del condominio Crestview Towers, en North Miami Beach, por condiciones eléctricas y estructurales inseguras. Los propietarios afirman que durante este tiempo han tenido que pagar miles de dólares en mantenimiento, pero no han podido regresar a sus hogares. "Nuestra angustia es que ya no hay dinero, en mi cuenta ya no hay. Estoy llamándolos para que ayuden a investigan qué pasa", dijo a Univision 23 Leyla Mora, una de las propietarias.

Datos de las autoridades del condado de Santa Clara indican que el número de desalojos ha incrementado luego de la culminación de los programas de protección para inquilinos, que iniciaron durante la pandemia. Según el reporte, en 2023 se registraron 3,180 desalojos, el número más alto desde 2014. La organización sin fines de lucro ‘Public Advocates’ recomienda a quienes estén experimentando problemas para pagar la renta, que pidan ayuda legal.

Los habitantes de más de 120 casas móviles recibieron una orden de desalojo, la cual fue emitida por un supuesto cambio en el uso del terreno. Aunque algunas familias ya han abandonado el lugar, otras se niegan a dejar las viviendas porque afirman que no tienen a dónde ir. La orden de desalojo está paralizada, pues los residentes presentaron una demanda para pedir más tiempo o una mejor compensación.