CPS

Mientras los miembros del concilio llevan a cabo la sesión mensual para discutir los diferentes proyectos de ley, manifestantes se conglomeran a las afueras de la municipalidad para exigirle a las autoridades de la ciudad acciones concretas frente a diversos temas, como la propuesta de acabar con el contrato entre el Departamento de Policía de Chicago (CPD) y las Escuelas Públicas de Chicago (CPS).

“Necesitamos seguridad en estas escuelas públicas”, asegura Raúl Montes, un activista y quien se opone a la iniciativa al igual que otros líderes de la comunidad. Sin embargo, tres concejales presentarán formalmente el proyecto ante el concilio de la ciudad este miércoles.

Este 17 de junio un grupo de concejales de la ciudad presentará un proyecto de ley ante el concilio municipal para poner fin al contrato de 33 millones de dólares entre el Departamento de Policía de Chicago (CPD) y las Escuelas Públicas de Chicago (CPS). Promotores de la iniciativa piden que se invierta el dinero en la contratación de enfermeras, psicólogos y trabajadores sociales y en la creación de programas de justicia restaurativa.

La iniciativa es apoyada por tres concejales de la ciudad, quienes buscan acabar con el contrato de 33 millones de dólares que existe entre el Departamento de Policía de Chicago (CPD) y las Escuelas Públicas de Chicago (CPS). Se espera que este miércoles 17 de junio los funcionarios presenten una ordenanza con la propuesta detallada.

Los trabajadores estarán asistiendo a los estudiantes de unas 30 Escuelas Públicas de Chicago (CPS) a partir del año escolar 2020-2021. Consejeros, bibliotecarios y coordinadores de justicia reparativa son algunos de los profesionales que llegarán a los planteles educativos para brindar ayuda a la comunidad estudiantil, que cuenta con un alto porcentaje de alumnos latinos y afroestadounidenses.

El Departamento de Escuelas Públicas de Chicago publicó un borrador en su cuenta de Instagram de lo que serán las pautas cuando los estudiantes vuelvan a clases en medio del coronavirus.