Hace algunos años atrás una amiga muy querida me comentó que su hija mordía. Lo peor de todo era que no sabía las causas por las cuales lo hacía. Muy preocupada fue al pediatra y le eliminó algunas dudas que luego me contó.

El bullying, tanto físico como verbal, es algo serio pues puede perjudicar la vida de los niños de manera irreversible. Se sabe de jóvenes que tomaron decisiones drásticas que los llevaron al suicidio, porque pensaban que ese tremendo acoso no acabaría nunca y que nadie los podría ayudar.

Cuando un niño está enojado y fuera de control, es muy fácil que como padres perdamos la calma y reaccionemos de forma similar a su comportamiento, iniciando una lucha de poder que solo termina por desgastar la relación con nuestros niños, además de lastimar su atoestima con gritos, regaños o castigos.

¡Prepárate para dar algunas respuestas ingeniosas a estas preguntas incómodas!

Puede ser que tu niño no se comporte como esperas, y eso podría ser tu responsabilidad.

Los excesos nunca son buenos, como padres debemos buscar el equilibrio...