Lugares emblemáticos de la ciudad como el Zócalo fueron invadidos por cientos de taxis que exigen al gobierno que aplicaciones como Uber, Cabify y Didi sean incorporados al Servicio de Administración Tributaria y paguen por una concesión para poder operar como transporte de pasajeros.

La plataforma planea expulsar y cancelar la cuenta a todos aquellos que hayan recibido quejas por ser agresivos con los choferes o hayan dejado basura en los vehículos.

La compañía de transporte informó que esta iniciativa se comenzará a implementar en EEUU y Canadá con el fin de garantizar un ambiente seguro y respetuoso para los usuarios y conductores. Cada pasajero podrá mejorar su puntaje siguiendo algunas recomendaciones.

Uber, la compañía que conecta a pasajeros con conductores a través de una aplicación móvil, endurecerá sus medidas de seguridad en cuanto a la seguridad de sus afiliados. Los usuarios ahora serán evaluados por la propia compañía y podrían incluso perder el servicio.

Los pasajeros podrán reservar dicho transporte a través de la aplicación y estará disponible desde el 27 de mayo para viajes en la Gran Barrera de Coral en Australia.

Más de 950 dueños de "medallones" o permisos para operar un taxi en la ciudad se han declarado en quiebra y otros miles tendrían serios problemas económicos, según un análisis de The New York Times.