Tras las quejas de residentes de Washington Heights, la Autoridad Metropolitana del Transporte (MTA) limpió este martes toda la extensión de sus plataformas e informó que está trabajando en conjunto con la policía para resolver el problema que aqueja a los usuarios de la estación de la calle 181.

La Autoridad Metropolitana del Transporte debe contar la aprobación de la compañía que iba a realizar la obra, si quiere descartar el cierre total de la línea y proceder con el plan que anunció el gobernador Andrew Cuomo de que sea únicamente durante los fines de semana.

La MTA aseguró que en múltiples ocasiones ha informado a la policía de la ciudad sobre las agujas usadas que se han hallado en la estación de la calle 181. Por su parte, la NYPD indicó que aumentó el monitoreo en un 300% con despliegue de oficiales en este lugar.

Los pasajeros que utilizan la terminal de la calle 181 y la Avenida St. Nicholas manifiestan su preocupación porque las agujas se han encontrado en diversas áreas de la plataforma. Algunos aseguran que pertenecen a adictos que las lanzan después de usarlas. La MTA señaló que ha tomado las medidas necesarias para enfrentar la situación.

Las llamadas tarjetas Metrocard ahora costarán la mitad de precio para 30,000 personas. El plan, que se aprobó el año pasado donde se anunció que aproximadamente 800,000 neoyorquinos podrían calificar, solo está disponible para aquellos que reciben asistencia pública en efectivo. Las autoridades recalcaron que la segunda fase comenzará en abril cuando otros 130,000 habitantes que reciben cupones de alimentos serán notificados con la información de aplicación.

Las suspensiones iniciaron este sábado e irán todos los fines de semana hasta el 8 de febrero. Usuarios frecuentes del servicio en cuestión aseguran que se ha convertido en algo "normal" que se registren interrupciones y arreglos.