Personas de diferentes ciudades llegaron a Tallahassee con la intención de pasar del dolor a la acción después de la reciente masacre que dejó 17 muertos. Con pancartas y consignas piden mayor control a los problemas de salud mental y la posesión de armas. Tienen al menos 70 reuniones programadas con los representantes estatales.

Tras la masacre en una escuela de Parkland, Florida, los estudiantes han decido alzar su voz para pedirles a los legisladores acciones concretas que garanticen su seguridad. Cientos de ellos han salido de sus instituciones educativas para marchar y presionar al gobierno.

El arma fue donada a la escuela para ser rifada y así conseguir fondos. Sin embargo, luego de los acontecimientos recientes donde murieron 17 personas en la secundaria Marjory Stoneman Douglas, el director del centro decidió sustituir el arma por otros premios.

Sobrevivientes de la escuela de Parkland llegan a la capital del estado con una apretada agenda con unas 70 reuniones con legisladores y con el gobernador. El movimiento estudiantil da un nuevo paso de fuerza a un mes de una marcha nacional en Washington DC.

Justo antes de que estudiantes supervivientes del tiroteo de Parkland llegaran a Tallahassee, la Cámara de Representantes de Florida votó en contra de una propuesta para limitar la venta de armas de asalto. "Están votando que sigamos yendo a las escuelas con miedo a sufrir otro tiroteo", afirmó la estudiante Lorena Sanabria.

Minutos después del tiroteo en una escuela de Parkland, empezaron aparecer sospechosos mensajes en las redes sociales a favor y en contra sobre el control de armas, hecho que, para expertos en tecnología, se trataría de una campaña de desinformación para polarizar la opinión pública en EEUU.