Ricardo Antonio Rosselló Neváres

Decenas de puertorriqueños no tienen agua potable ni electricidad y el número de muertos ha aumentado. Ricardo Rosselló habla de esto y su actitud hacia Trump.

Las intersecciones de Puerto Rico se han convertido en tierra de nadie, y mientras más gente vuelva a su normalidad, más autos se unirán al caos que ya existe.

En medio de congestiones vehiculares y cierres de vías, el presidente Donald Trump llegó a Puerto Rico para establecer, junto al gobernador Ricardo Rosselló y su equipo de trabajo, soluciones para los afectados por el paso del huracán María.

La alcaldesa de la capital de Puerto Rico, Carmen Yulín Cruz, respondió este viernes a comentarios de la secretaria del Departamento de Seguridad Nacional, Elaine Duke, quien dijo que los esfuerzos federales para ayudar a la isla a recuperarse de la devastación del huracán María son "una buena noticia".

En medio de una conferencia de prensa, Ricardo Rosselló, gobernador de Puerto Rico, aseguró que el paso del huracán María es la tragedia natural más grande de la historia de la isla y anunció que se instalarán 11 centros regionales donde se repartirán ayudas. Se espera que 1,460 agentes de la Guardia Nacional lleguen para proveer seguridad y logística.

Abraham López, encargado de Asuntos Hispanos de la Gobernación de Nueva Jersey, destacó la unidad del pueblo puertorriqueño en su estado. "El gobernador Chris Christie ha tenido conversaciones con el gobernador Rosselló y estamos listos para ayudar, para orientar y capacitar a los que están trabajando en la isla", señaló.