El conductor rodó con su auto y cayó en un terreno complicado de la zona de Malibú, lo que dificultó las labores de los rescatistas. El herido fue transportado en helicóptero hasta un hospital especializado en trauma.

En solo dos minutos, un guardacostas pilotó un dron hasta el lugar donde se encontraban los jóvenes, y les lanzó un salvavidas flotante, que les permitió llegar hasta la costa. Australia lanzó un programa para vigilar sus costas con esta tecnología, y prevenir a la población de los ataques de tiburón, pero en esta ocasión sirvió incluso para salvar a dos jóvenes de ahogarse en el agua.

La pequeña voló por el aire y cayó en una lona, donde la recibieron los vecinos. La desesperada madre gritaba desde la casa y pedía ayuda para salvar a su hija.

Quince personas fueron trasladas al hospital como manera preventiva ya que no se registraron heridos de gravedad. En la operación de rescate participaron la Guardia Costera y los bomberos de New Port Richey.

Un consultorio dental recibió la visita inesperada de dos personas que entraron por la ventana del segundo piso con su automóvil. El conductor habría admitido estar bajo la influencia de narcóticos.

Las autoridades confirmaron que cinco personas siguen desaparecidas en Montecito luego del mortal deslizamiento que además dejó 19 muertos. Actualmente 2,000 bomberos y policías participan de las labores de rescate.