El Congreso se dispone a recibir a puerta cerrada a Kurt Volker, quien renunció como enviado especial del Departamento de Estado a Ucrania en medio del escándalo. Mientras tanto, el presidente luce molesto y preocupado, como dejó ver en plena conferencia de prensa con su homólogo finlandés Sauli Niinisto.

En una conferencia de prensa, el secretario de Estado admitió que estuvo presente durante la conversación telefónica que sostuvo Donald Trump con Volodymyr Zelenski. Esto ocurre en momentos de tensión con legisladores que lo acusan de tratar de limitar la investigación que busca llevar a juicio político al mandatario.

Se agudizan las tensiones entre la Casa Blanca y legisladores demócratas tras la llamada entre el presidente y su homólogo ucraniano. La Cámara Baja programó al menos dos comparecencias para el jueves, a pesar de los esfuerzos del secretario de Estado para retrasar las audiencias.

Fuentes del Departamento de Justicia confirmaron que el fiscal general William Barr le pidió al presidente que a su vez le solicitara al líder australiano que le ayudara a investigar y desmentir que su campaña tuviera relación con Rusia en las elecciones de 2016.

El secretario de Estado, sin embargo, aseguró hace unos días no conocer detalles de la queja. Por otro lado, al menos tres comités de la Cámara Baja citaron al abogado del presidente, Rudy Giuliani, mientras crece la preocupación por la seguridad del informante anónimo.

“El Consulado ha ofrecido y reitera su apoyo a la familia del talentoso intérprete mexicano José José, en apego a las leyes estadounidenses e internacionales, relativas a la asistencia consular”, se lee en un mensaje de la cuenta de Twitter @ConsulMexMia, mientras los hijos mayores del intérprete informaban a medios que desconocían el paradero de los restos de su padre.