Las llamas que arrasan una zona costera al noreste de Atenas han dejado cerca de 75 fallecidos, más de 180 heridos -algunos estado crítico- y numerosos desaparecidos. Muchas personas lograron salvarse metiéndose con botes en el mar. Otras perecieron ahogadas mientras intentaban huir del fuego.

La fuerza de la naturaleza acabó, incluso, con el único hospital disponible en una de las áreas afectadas. Decenas de estructuras quedaron destruidas y los autos volcados en las calles.

Las llamas que iniciaron el pasado viernes cerca del Parque Nacional Yosemite siguen avanzando sin control, pues hasta ahora solo han sido contenidas en un 7%. El fuego Ferguson ha obligado a la evacuación de varias zonas y afecta el turismo del parque.

Los equipos de emergencia combaten las llamas desde el viernes por la noche, pero solo han logrado contener el 5% hasta este martes. El fuego ha consumido más de 12,500 acres y ya cobró la vida de uno de los bomberos.

Algunas personas sangraban por los oídos luego de que el avión tuvo que aterrizar de emergencia en Alemania en medio de su trayecto entre Irlanda y Croacia. Unas 33 personas sufrieron heridas no graves y algunas recibieron atención médica.

En Denton, la unidad móvil de una compañía de construcción quedó totalmente destruida, un trailer volcado provocó el cierre de una vía. Mientras que en Fort Worth un gigantesco anunció se derrumbó sobre una tienda.