Este viernes, 20 de enero, inició el juicio en contra de Leonel Orrego, el conductor que en agosto de 2018 atropelló mortalmente a cuatro motociclistas en la I-95, aparentemente bajo los efectos del alcohol. Un familiar de una de las víctimas aseguró que “no se hizo justicia”, ya que desde que ocurrió el accidente Orrego ha estado en libertad.

En Tallahassee presentaron un proyecto de ley que busca consecuencias más severas a aquellos conductores que se niegan a hacerse la prueba de alcoholemia. Según la propuesta, se instalarían dispositivos en el vehículo que obliga al chofer sancionado a realizarse el test y en caso de dar positivo se activa un bloqueo que impide que el automóvil avance. El abogado Daniel Pérez señala que para evitar suplantaciones, el aparato toma la foto y sabrá quién fue la persona que sopló.

Quienes rechacen por primera vez este examen, podrían tener bloqueado el encendido de su vehículo por un año. Esto es parte de lo que busca un proyecto de ley presentado por un representante estatal republicano.

Ieasha Boyd, de 37 años, enfrenta un cargo de homicidio involuntario y dos cargos de negligencia infantil, tras manejar en estado de ebriedad con dos menores de 5 y 12 años y chocar contra la camioneta que conducía Miguel Díaz Arzola, quien murió, en St. Petersburg.

Una cámara de vigilancia captó el momento en que una multitud de personas, incluido un hombre que sostiene a un perro, trata de evitar que escape, sin embargo, Koz se sube a su automóvil y se echa en reversa.

Una persona se encontraba al interior de la vivienda cuando ocurrió el accidente; dos personas fueron trasladadas a un hopital después de resultar hierdas en el accidente